Hoy, la CIJ llamó a la Organización de los Estados Americanos (OEA) a respetar la autonomía e independencia de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), como órgano encargado de promover la observancia de los derechos humanos en las Américas, incluso respecto de sus funciones administrativas básicas.
El Secretario General de la OEA se ha negado a respaldar la decisión unánime tomada por la Comisión Interamericana en enero de 2020, de renovar el mandato del Secretario Ejecutivo de la CIDH, Paulo Abrão, cuyo mandato expiró el 15 de agosto.
La negativa a renovar un mandato no puede hacerse sobre la base de denuncias presentadas, sino que éstas deben ser previamente resueltas en un plazo razonablemente breve, con base en los principios del debido proceso para todas las partes interesadas.
La CIJ señala la importancia de tramitar oportunamente las quejas realizadas por el personal conforme a los principios del debido proceso para todas las partes, y de contar con procedimientos transparentes e independientes para ello.
La CIJ recuerda que es fundamental asegurar la independencia y la autonomía de la Comisión Interamericana, lo que necesariamente incluye su Secretaría Ejecutiva y las funciones relacionadas con el proceso de nombramiento de su titular.
El Secretario General de la CIJ, Sam Zarifi, mencionó que “la CIDH ha desempeñado un papel fundamental en las Américas para promover los derechos humanos y proteger a las víctimas de violaciones de derechos humanos”. Agregó que “la situación requiere una resolución urgente que garantice el respeto de los principios de independencia y autonomía de la CIDH”.